El jueves 30 de mayo la Universidad Nacional de La Plata hizo entrega de legajos reparados a familiares de trabajadores/as docentes y nodocentes detenidos/as, desaparecidos/as y asesinados/as por el terrorismo de Estado que pertenecieron al Liceo “Víctor Mercante”. En ese marco, también se entregaron los legajos de María Celina Lacay Bardelli de Torres Molina y de la querida profesora María Isabel Chorobik de Mariani, “Chicha”, a quien se homenajeó por su ejemplo de lucha.
La ceremonia tuvo lugar en el Salón de Actos “Chicha Mariani” del colegio y fue encabezada por el Vicepresidente Académico de la UNLP, Martín López Armengol, la Prosecretaria de Derechos Humanos, Verónica Cruz y la Directora del Liceo, María Constanza Erbetta quienes estuvieron acompañados/as por el Secretario General de la UNLP, Patricio Lorente, el Secretario Académico, Aníbal Viguera, la Prosecretaria Académica, Agustina Peláez, los/as decanos/as de las facultades de Humanidades y Ciencias de la Educación, Bellas Artes y Arquitectura, las directoras del Bachillerato de Bellas Artes “Prof. Francisco A. De Santo” y del Colegio Nacional “Rafael Hernández” y las/os integrantes del Equipo de Gestión del Liceo. También estuvieron presentes familiares de las víctimas, Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, integrantes de la Asociación Anahí y de la Asociación Familiares de Detenidos y Desaparecidos por Razones Políticas, representantes de los gremios ADULP y ATULP y profesores/as, nodocentes y estudiantes de 5° y 6° años del colegio.
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La apertura del acto estuvo a cargo de Verónica Cruz y María Constanza Erbetta. En su intervención, Cruz afirmó que “este encuentro constituye un acto de reparación con las víctimas del terrorismo de Estado” y agregó, “para que todo esto sea posible tiene que haber una decisión política institucional como la que tomó la UNLP. La reparación de legajos se logró tras un enorme esfuerzo de docentes e investigadores, de personal no docente y por la lucha del movimiento estudiantil”. En tal sentido, recuperando las luchas y el legado del movimiento de derechos humanos, sostuvo que se trata de “un camino abierto que despliega un pensamiento y una práctica política colectiva, comprometida y activa, movilizada en reconstruir las memorias del genocidio desde esta querida universidad pública”. Asimismo, la Prosecretaria de Derechos Humanos recordó que los distintos actos de reparación se enmarcan en resoluciones de la UNLP que “reafirman la necesidad de desandar el camino del horror e impunidad implantado por los genocidas y de conocer y registrar la verdad de lo ocurrido en la sociedad y, particularmente, en nuestra universidad que fue víctima y, a la vez, victimaria de la persecución y del terror”. Por último, reconoció el trabajo coordinado entre el Liceo y la Prosecretaria de Derechos Humanos a través de la Dirección de Políticas de Memoria y Reparación, así como el permanente acompañamiento y aporte de los organismos de derechos humanos y de familiares.
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Por su parte, Erbetta remarcó que en el Liceo “la construcción colectiva de la memoria se sostiene en el tiempo desde hace muchos años como una forma de iluminar el presente” y, desde allí, “seguiremos forjando encuentros con otros, con los/as jóvenes, porque en ellos y en ellas están los mundos que queremos construir”. A su vez, la Directora enfatizó que “en el actual contexto negacionista, se vuelve necesario ser claros y precisos con la enunciación: fue un genocidio, fueron 30.000”. En el cierre de sus palabras y en uno de los momentos más significativos del acto, Erbetta recuperó la potencia de las voces de estudiantes, preceptores y docentes del Liceo, víctimas de la dictadura, a través de la lectura de notas, discursos y fragmentos de libros escritos por ellas y ellos. Valoró la labor comprometida de quienes llevaron adelante la reparación de los legajos en el Liceo, las profesoras Gabriela Arreseygor, Jorgelina Trofino, Inés Aprea y Ana Lacchini; y agradeció el acompañamiento de distintos/as integrantes de la comunidad educativa del colegio que colaboraron para que dicha tarea y para que el acto sean posibles. Por último, Erbetta leyó la nómina de las dieciséis personas de quienes se entregaron los legajos.
Seguidamente, se dio lugar a la entrega de los legajos a los/as familiares y allegados/as, quienes pasaron a recoger las carpetas de manos de Erbetta, Cruz, López Armengol y de la ex Directora del Liceo Nora Semplici, en un clima de emoción y respetuosos aplausos. Luego, subieron al escenario integrantes del Centro de Estudiantes del Liceo quienes compartieron algunas sensaciones y reflexiones sobre el acto y sobre la importancia de las políticas de memoria, verdad y justicia. El cierre de la ceremonia estuvo a cargo del Coro del Liceo que cantó tres canciones para los/as presentes.
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Cabe recordar que en 2015, por Resolución de la UNLP, se estableció “disponer la inscripción de la condición de detenido-desaparecido o asesinado, en los legajos de los docentes, no docentes, graduados y estudiantes de esta universidad” y dejar constancia de los “reales motivos que determinaron la interrupción del desempeño laboral o estudiantil de todos aquellos que fueron víctimas de la última dictadura cívico-militar”. Esta iniciativa constituye un aporte de la UNLP como expresión del compromiso de cumplir con el imperativo de Memoria, Verdad, Justicia y Reparación por las violaciones a los Derechos Humanos.
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Nómina de los/as trabajadores/as docentes y nodocentes del Liceo Víctor Mercante de quienes se repararon sus legajos:
María Virginia Aurora Allende Calace
Joaquín Enrique Areta Sagarzazu
Rita Liliana Remedios Artabe Bajamón
Alicia Estela Bearzi Poggio
Alicia Mirta Contrisciani Spinsanti
Liliana Élida Galletti Busi
Víctor Hugo Kein Roman
Osvaldo Alfredo Lenti Inglese
Beatríz Noemí Longhi García
Daniel Enrique Mariani Chorobik
Victorio Graciano Perdighé Milia
María Inés Raverta Gorostiaga
Lucía Mirta Swica Wasiuneck de Caravelos
Diana Esmeralda Teruggi Dawson
También se homenajeó a las profesoras
María Celina Lacay Bardelli de Torres Molina
María Isabel Chorobik de Mariani, “Chicha”
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